Antes de tratar los efectos de la marihuana queremos mostrar nuestra disconformidad con la persecución a la que se ha visto sometido el entorno del cannabis desde todos los sectores de la sociedad, desde el punto de vista legal, ético y moral y prácticamente desde todo tipo de enfoques críticos. Los medios tradiciones conservadores que se posicionan claramente en contra de la marihuana, ya sea para uso médico o recreativo, solo hablan de los incidencias negativas que puede tener esta sustancia en nuestro organismo, pero raras veces hablan de los efectos beneficiosos terapéuticos, que cada vez son más conocidos y estudiados, y nunca de los beneficiosos relacionados con el entretenimiento, que al fin y al cabo son demandamos por millones de personas a lo largo y ancho del planeta.
Nosotros no queremos animar a nadie al consumo, ni afirmar que no existe ningún efecto negativo, pero si queremos que las personas adultas tengan el derecho a decidir el consumir o no consumir una sustancia cuyas consecuencias son mucho menos nocivos que los de otras sustancias legales como el tabaco o el alcohol. Estas sustancias tan integradas en nuestra sociedad son mucho más perjudiciales tanto en lo físico como en lo social, sin embargo, son bien tratadas por este tipo de medios y por la sociedad en general. A pesar de estar sobradamente probado que son más dañinas, están socialmente aceptadas y nadie se siente avergonzado por consumirlas mientras que los consumidores de marihuana deben ocultarse y abastecerse en el mercado negro rozando los límites legales o directamente traspasando esos límites. Incluso cultivar, que es la manera más legal de conseguir cannabis, en la mayoría de los países es ilegal. Todo esto que parece tan absurdo es la realidad
Es verdad que en algunos países se están haciendo grandes avances y poco a poco va mejorando la situación con respecto a la legalización de esta sustancia para uso médico e incluso recreativo y en gran parte esto ha sido promovido por las numerosas propiedades terapéuticas que la marihuana posee, muchas de ellas demostradas científicamente.
Dicho esto, en I Wanna Grow queremos hablarte de los efectos de la marihuana por consumo, de esa senación gradable que busca el consumidor lúdico que usa esta sustancia para relajarse, divertirse o expandir su mente.
Los efectos de la marihuana. Factores de los que depende
No podemos esperar que siempre sean iguales. No hablamos de una regla matemática y aunque si podemos hablar de unos patrones que se repiten siempre hay que matizar en función de una serie de factores:
- La persona. Cada persona es un mundo y como pasa con otras sustancias, no todos vamos a experimentar las mismas sensaciones con la marihuana. Hay consumidores más sensibles que otros e Incluso hay personas que no toleran sus efectos afirmando sufrir experiencias muy negativas. Además, cada persona puede exteriorizar los efectos de la marihuana de forma distinta.
- La tolerancia. El mayor o menor efecto está directamente relacionado con el hábito de consumo. Las personas que consumen mayores cantidades y de manera más habitual necesitan más cantidad para experimentar las mismas sensaciones.
- El método de consumo. La marihuana puede ser fumada sola, fumada con tabaco, fumada en forma de aceite, vaporizada, bebida en infusiones, comida en multitud de recetas como las típicas galletas de maría y aplicada sobre la piel en forma cremas o pomadas. Pues dependiendo de la vía de consumo tardará más o menos rato en actuar y su efecto será más o menos prolongado y potente.
- El entorno. El estado de ánimo y el entorno en el que nos encontremos puede influir en el efecto de la marihuana ya que no es lo mismo consumirla en un ambiente festivo y relajado con buena compañía, que hacerlo solo o en un ambiente más estresante, o en situaciones no recomendables, como antes de ir a trabajar o en el mismo trabajo. Si el entorno es favorable probablemente el efecto sea más placentero
- La mezcla con otras sustancias. Si mezclamos la marihuana con otras otras drogas o alcohol su efecto se puede ver muy potenciado por lo que no recomendamos las mezclas. En España la marihuana se suele mezclar de forma muy habitual con tabaco y no es lo más recomendable ya que este es altamente adictivo y más perjudicial para la salud.
- Nivel de cannabinoides. Los cannabinoides principales de la marihuana son el THC y el CBD. El THC es el más psicoactivo y el responsable de la mayoría de efectos de tipo lúdico y el CBD es más medicinal y carece de psicoactividad aunque si puede inducir estados de relajación. Por lo tanto, en función de la mayor o menor concentración de estas sustancias el efecto puede ser más o menos potente.
- Tipo de marihuana. Existen dos tipos, la índica y la sativa. Las índicas inducen a un estado más relajante tanto a nivel físico como mental y las sativas suelen provocar un efecto más enérgico, excitante y psicoactivo. Hay plantas híbridas que pueden mezclar los efectos de ambos tipos. Aunque existen miles de variedades de marihuana en el mercado actual, todas van a estar englobadas dentro de estos 3 grandes grupos
Es recomendable saber siempre qué variedad vamos a consumir antes de hacerlo y los efectos que provoca para después no experimentar sensaciones no deseadas, ajustando nuestra dosis en base a su potencia, entre otros factores
Los efectos más conocidos de la maría.
La marihuana fumada empieza a hacer efecto en torno a los 10 o 15 minutos de haberla consumido y este se puede prolongar desde media hora hasta 3 o 4 horas dependiendo de la variedad consumida, de la cantidad y otros factores vistos anteriormente
Los efectos son muy variados, pero todos ellos suelen ser muy placenteros en personas sanas que consuman cantidades prudentes y que esté buscando este tipo de sensaciones. Además, estos efectos pueden darse mezclados o de manera lineal, por ejemplo, empezando por un estado más eufórico y excitante para pasar a un estado más relajado y somnoliento.
- Relajación mental. Nuestra mente se relaja y nos permite evadirnos de los problemas cotidianos, que, aunque solo sea por un rato, siempre es de agradecer sobre todo en una sociedad tan estresante como la actual.
- Relajación física. Nuestros músculos se relajan y esto nos provoca un gran placer.
- Excitación y euforia. Estado de exaltación muy agradable en el que nos vemos con más fuerza y capaces de hacer cosas que no haríamos en estado normal.
- Risas. Es un efecto muy buscado por los consumidores lúdicos ya que siempre hace pasar un buen rato y sobre todo en buena compañía.
- Agudeza visual. A veces pueda darnos la sensación de ver con más claridad.
- Mayor sensibilidad. Nos hace experimentar sensaciones con mayor intensidad.
- Bienestar general. Nos encontramos bien gracias o la combinación de efectos explicados con anterioridad. Cuando consumimos maría nuestro cerebro produce mayor cantidad de serotonina y dopamina de manera similar a cuando se practica sexo, cuando se hace ejercicio o cuando nos enamoramos.
- Locuacidad. El bienestar y la euforia induce a hablar con más soltura, en algunas ocasiones. Esto no pasa siempre porque como hemos dicho depende mucho de la situación y el entorno
- Inducción al sueño placentero. A veces se usa para ayudarnos a conciliar el sueño o para combatir el insomnio
- Aumento del apetito. Es muy habitual que de hambre después de consumir.
- Cambios en la percepción como pequeñas alucinaciones (Normalmente a dosis más altas o con personas más intolerantes)
El consumo de cannabis, a corto plazo, por personas saludables con objetivos lúdicos, no presenta grandes riesgos más allá del colocón, aunque siempre hemos de tener en cuenta, al igual que ocurre con cualquier otro tipo de drogas legales o ilegales que el exceso puede provocar efectos demasiado potentes no deseados. En el caso de la marihuana estos pueden ser bajadas de tensión (blanca, blancazo, amarillo), mareos, ansiedad, taquicardia, agobio o paranoia y desorientación. Todos estos efectos desagradables por exceso suelen durar muy poco tiempo y no tienen consecuencias graves.
También hemos de tener siempre muy presente que el consumo debe ser responsable e intentar no excedernos, no solo en las cantidades, si no, además, en la frecuencia. A mayor cantidad y frecuencia, aunque los riesgos sean menores que en otras sustancias, siempre puede haberlos y aquí no queremos decir que la marihuana sea la panacea, pero si nos gusta destacar que hasta la fecha no tenemos constancia de muertes por cannabis en personas sanas, mientras si las tenemos por otras sustancias legales como tabaco, alcohol, barbitúricos, ansiolíticos y sedantes.
Incidimos siempre en que lo de “personas sanas” porque es cierto que el consumo de marihuana puede tener efectos negativos en personas con ciertas enfermedades como las mentales, aunque por otro lado el cannabis actúa de forma beneficiosa para otra gran cantidad de dolencias como pueden ser la inapetencia, le insomnio, los dolores de tipo muscular, la ansiedad, el nerviosismo o el estrés. También se ha demostrado su utilidad para paliar los efectos negativos que provocan algunos tratamientos muy agresivos como la quimioterapia para el cáncer. En este caso ayuda a controlar el vómito y aumenta el apetito. A pesar de sus múltiples aplicaciones médicas beneficiosas no debemos auto medicarnos y siempre debemos pedir el consejo de un especialista.
Efectos del cannabis en consumidores novatos
Lo primero que queremos remarcar es que no incitamos a nadie al consumo de marihuana. Solo queremos que aquellos adultos que dan el paso de manera responsable tengan la mayor información posible a su alcance sobre la sustancia que han decidido consumir libremente.
Cualquier persona que ha decidido iniciarse en el consumo debe saber que la marihuana, a pesar de ser una droga blanda, es una droga y como todas las drogas puede crear adicción, entre otros efectos adversos, aunque sea a menor escala y sobre todo en el consumo a largo plazo y en grandes cantidades.
Cuando se consume cannabis las primeras veces hemos de tener en cuenta que el efecto puede ser mucho más potente y desconcertante, incluso desagradable. Hay que consumir cantidades muy pequeñas para ver como se reacciona, estar acompañado de gente con experiencia y tomárselo con calma, parando si notamos algún efecto no deseado. Hemos de estar también bien informados de la variedad que vamos a consumir, de su potencia y efectos. Al principio podemos experimentar mareos parecidos a los de la primera vez que se fuma tabaco y según nuestra sensibilidad nos podría bajar la tensión, aunque si lo hacemos bien no tiene porqué.
Fumada, la hierba comenzará a hacernos efecto al cabo de unos 10 o 15 minutos y este puede ser más o menos largo dependiendo de la variedad. Lo que puedes experimentar ya lo hemos explicado en los párrafos anteriores. Relax, bienestar, euforia, etc.
Si no te gusta el efecto no tienes por qué seguir y no debes dejar que nadie te influencie porque esto no es una obligación si no una elección libre de personas adultas. Nunca lo hagas por imitación, por obligación o por hacerte el guay. Por fumar marihuana no vas a ser ni mejor ni peor que nadie y esto no es para impresionar.
Ahora que ya conoces cuáles son los efectos de la marihuana, los factores influyentes y los pros y los contras del consumo podrás tomar la decisión más oportuna. Elige bien y sobre todo piensa antes de actuar.