Índice de contenidos
- 1 1. No ser discreto
- 2 2. No informarte como mínimo de lo básico
- 3 3. Siembra temprana
- 4 4. Utilizar macetas inadecuadas
- 5 5. Usar sustratos de baja calidad.
- 6 6. Regar en exceso.
- 7 7. Regar con mucha frecuencia y con poca cantidad de agua
- 8 8. No regular el pH del agua de riego.
- 9 9. No usar abonos
- 10 10. Exceso de fertilizantes.
- 11 11. Malos tratos
- 12 12. Falta de observación y seguimiento
- 13 13. La contaminación lumínica
- 14 14. Usar fertilizantes hasta cosechar
- 15 15. Cosechar antes de tiempo.
1. No ser discreto
Esto no te va a ayudar a tener mejores o peores plantas pero te puede buscar muchos problemas. A algunos cultivadores les gusta mucho hablar de sus plantas con todo el mundo y aunque están en su derecho, la legislación está como está y si no quieres llevarte un susto es mejor compartir tus secretos solo con gente de confianza.
2. No informarte como mínimo de lo básico
Es un error habitual el lanzarse a cultivar sin tener ni idea y si te da igual como salgan las plantas pues está bien, el problema es tuyo pero si te vas a acabar pillando el cabreo del siglo cuando salgan mal y vas a buscar culpables como por ejemplo los del Grow de turno, lo que hay que hacer es informarse un poco desde el principio. Por lo menos saber cómo germinar, que tierra usar, qué productos utilizar. Hay gente que nunca ha cultivado y de primeras ya quieren empezar con un hidropónico o aeropónico
3. Siembra temprana
A veces no podemos esperar y decidimos plantar en pleno invierno sin ningún tipo de cuidado extra y esto siempre es un error. Creemos que por plantar antes vamos a tener una mayor cosecha pero esto no es así. La marihuana no es una planta de invierno y lo ideal es esperar a la primavera y si quieres plantas de pequeño tamaño puedes ponerlas incluso hasta finales de junio. Se puede sembrar pronto pero con cuidados extra que nos ayuden a hacer frente a las adversidades climáticas perjudiciales para las plantas (viento, bajas temperaturas, falta de luz…
4. Utilizar macetas inadecuadas
Siempre debemos usar las macetas correctas respecto al tamaño y respecto al color. En exterior siempre debemos usar macetas de plástico blancas que reflejan la luz y no atraen el calor y en interior lo más común son las macetas negras de plástico aunque no es tan importante como en exterior. No se aconsejan tampoco las macetas de barro porque filtran la humedad y elevan la temperatura del sustrato. El tamaño de las macetas debe ser el adecuado dependiendo de si estamos haciendo trasplantes o es el tiesto definitivo. Normalmente en exterior cuanto más grande sea la maceta definitiva mejor y en interior llegaremos como máximo a 11 litros. No debemos intentar parar el crecimiento de una planta con una maceta pequeña, para eso es preferible ponerla más tarde. Aquí tienes una serie de consejos extendidos sobre el color de las macetas para la marihuana
5. Usar sustratos de baja calidad.
La tierra es uno de los factores básicos para obtener plantas sanas y fuertes y esta debe ser esponjosa, aireada, con turba, humus, perlita… No tiene sentido gastarse un pastón en unas buenas semillas e infinidad de productos y después poner sustrato del chino o tierra reutilizada. Usando sustrato malo nos arriesgamos a tener plantas débiles y estancadas y a contraer plagas.
6. Regar en exceso.
Si tenemos un sustrato muy empapado de forma continuada este quedará apelmazado y no podrá oxigenarse con lo que las raíces pierden movilidad, ralentizan el crecimiento y en el peor de los casos, que es bastante habitual, se pudren las raíces y la planta puede llegar a morir. Si quires saber más sobre el riego haz clic aquí
7. Regar con mucha frecuencia y con poca cantidad de agua
Es uno de los errores más típicos y de los que más daños ocasionan. Aquí te indicamos como regar la marihuana de la manera correcta.
8. No regular el pH del agua de riego.
Normalmente el pH del agua de riego suele ser alta y deberemos medirlo y corregirlo con ácido. El pH adecuado se encuentra en el rango de entre 5.8 y 7 que es donde se absorben mejor los nutrientes. Con un pH alto o bajo por mucho que abonemos habrá nutrientes que no sean absorbidos y esto puede desembocar en carencias o sobre fertilizaciones. Si quieres aprendender a medir y controlar el ph ojea este manual
9. No usar abonos
Lo habitual cuando cultivamos marihuana es querer sacar la mayor producción posible, de la mejor calidad y con una buena aromática y potencia. Pues todas estas propiedades son mucho más difíciles de conseguir si no alimentamos a la planta que normalmente acabará teniendo alguna carencia. También es aconsejable usar fertilizantes y aditivos en tierra madre.
10. Exceso de fertilizantes.
Este es otro error muy típico que puede ocasionar problemas irrecuperables. No hay que excederse nunca en el uso de fertilizantes, hay que fijarse en las indicaciones del fabricante y empezar a usar siempre menos cantidad de abono del indicado en ellas. Empezaremos abonando por ejemplo con la mitad o menos de la dosis recomendada e iremos subiendo la dosis semana a semana hasta llegar como mucho a la máxima recomendada aunque es bueno quedarse un poco por abajo. Debemos observar la planta continuamente para comprobar si le falta o le sobra abono. Normalmente cuando empieza a amarillear por las partes bajas puede ser falta de nutrientes y si tiene un color verde muy oscuro y textura lechugosa puede ser que estemos iniciando una sobre fertilización.
11. Malos tratos
Hay gente que hace cosas bastante raras con las plantas como regarlas con mezclas extrañas (coca cola, leche, miel, orina, Red Bull, etc.) o ir quitando hojas cada dos por tres, clavarles cosas, maltratar al sustrato, etc. Todo esto solo consigue estresar a las plantas, frenar su desarrollo y perjudicarlas. No hay que hacer experimentos raros que te hayan contado a no ser que te quieras arriesgar.
12. Falta de observación y seguimiento
Si queremos que nuestro cultivo tenga éxito es fundamental observar las plantas continuamente en busca de signos de sobre fertilización, carencias, exceso de calor, exceso o falta de agua o plagas. Si hacemos el seguimiento adecuado siempre estaremos a tiempo de resolver los problemas.
13. La contaminación lumínica
Es necesario que las plantas tengan su tiempo de luz y su tiempo de oscuridad. Si en las horas de oscuridad reciben algún tipo de luz puede ser que no acaben nunca de florecer.
14. Usar fertilizantes hasta cosechar
A medida que vamos usando abonos y va pasando el tiempo se van acumulando sales en las raíces y van quedando resto de producto por lo que es aconsejable dejar de abonar unos 10 o 15 días antes de la cosecha para que la hierba sepa mejor, no rasque en la garganta y sea más limpia. También es conveniente hacer un lavado de raíces al dejar de abonar.
15. Cosechar antes de tiempo.
A veces estamos impacientes por probar nuestra cosecha y cortamos antes de tiempo con lo que al final nuestra hierba no está hecha del todo y acaba siendo poco potente. Es mejor esperarse un poquito y cortar en el momento adecuado.
Indoorlandia dice
Es necesario que las plantas tengan su tiempo de luz y su tiempo de oscuridad. Si en las horas de oscuridad reciben algún tipo de luz puede ser que no acaben nunca de florecer.